DAJABON. El cónsul de la República de Haití en esta provincia fronteriza confirmó que prosiguen las repatriaciones de los ciudadanos de su país que no pudieron calificar dentro del Plan Nacional de Reguralización de Extranjeros y que han sido apresados por inspectores de la Dirección General de Migración dominicana.
Noll Lukmen indicó que, ciertamente, el pasado sábado fue deportado el mayor número de ciudadanos haitianos, 18 en total, que previamente fueron detenidos en operativos de Migración en la ciudad norteña de Santiago de los Caballeros.
No obstante, el diplomático haitiano declaró que hasta el momento no tiene informes de que los derechos de sus conciudadanos hayan sido violados al momento de su detención.
Asimismo, Noll Lukmen declaró que la salida voluntaria de muchos de sus compatriotas ha continuado por esta y otras zonas fronterizas.
“Las repatriaciones de mis compatriotas se debieron a que se encontraban de manera irregular en territorio dominicano”, declaró Lukmen, a través de un intérprete haitiano a los periodistas que lo entrevistaron en su despacho de esta localidad.
Mercados
Aunque hace varios días que se iniciaron las repatriaciones de ciudadanos haitianos en conflicto con las leyes migratorias, las ferias comerciales que se celebran cada lunes y viernes en esta parte del país no se han visto entorpecidas. Por el contrario, en los intercambios comerciales se ha notado una mayor participación de dominicanos y haitianos.
Asimismo, los productos que antes eran impedidos de entrar a la vecina nación son permitidos por los inspectores o celadores de Aduanas de Haití.
En tanto, el paro que mantienen los transportistas de mercancías desde República Dominicana a Haití por esta franja fronteriza llegó a su día 16, sin que las autoridades dominicanas o haitianas hayan hecho propuesta alguna de atención a sus demandas.
Giovanny Escotto, presidente de la Federación Dominicana de Transportes (Fenatrado) en esta ciudad, informó que las pérdidas tanto para los comerciantes como para los choferes, es millonaria.
Dijo que en cada día dejado de laborar, los comerciantes e industriales dominicanos han dejado de vender unos 100 millones de pesos.
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